Esta receta, está preparada tal cual como la dicta mi abuelita de más de 90 años. Es una ventana que retrocede al tiempo de un Chile con costumbres más criollas y caseras; a los deliciosos licores de antaño.
Cada fiesta de año nuevo, ella preparaba una mistela de palo de membrillo, que era espectacular en sabor y color. Pero hoy es el turno del delicioso y tradicional Enguindado.